En el último momento

Su carácter perfeccionista le había llevado a decidir en su lecho de muerte, qué epitafio le definía mejor. "Busqué la perfección toda la vida", le parecía una buena opción, pero también podía ser "Busqué la perfección toda mi vida". Su mujer no quería decirle que en realidad era lo mismo, pues sabía lo importante que era esa decisión para él. Simplemente se mantenía atenta a las que iban a ser sus últimas palabras. "Mi vida", decía él, "tiene más fuerza, pero la vida puede hacer que todo el que lea la frase se identifique con ella". Cuando su monólogo cesó, su mujer dio por zanjada la cuestión sin entrar en valoraciones que le parecían totalmente inútiles.

El día del entierro, el éxito del epitafio fue rotundo. Todos alabaron el buen gusto de aquel hombre que desde el lugar donde estuviera los consolaba enviándoles un mensaje de esperanza: "La vida es la peor opción".



17 comentarios:

Unknown dijo...

Un humor que es duro y afable a la vez y una engañosa esperanza: el mensaje no es del muerto.
Rara avis este texto, rara pero inteligente. Me encantó.

Juan Vásquez dijo...

Está muy bueno, aunque siento que la fuerza no está en el texto propiamente dicho sino en su mensaje.

Maite dijo...

Por encima del humor, este texto tiene mucha miga, y un trasfondo mucho más amplio que el aparente. La verdad es que para alguien que se está muriendo, muy probablemente, la vida es la peor opción. Me ha gustado mucho y creo que tiene un mundo de posibilidades este relato. Un abrazo.

Claudia Sánchez dijo...

Pues a mí me pareció fantástico Belén! Me gustó mucho y coincido con Maite que tiene mucha tela para cortar.
Saludos!

Puck dijo...

Me gustó. Pero yo pensé en la mujer "tomándose la revancha" tras la muerte de un marido que se pasó media vida analizando cuestiones como el "la" o "mi" del epitafio. Quizás esté totalmente desencaminada... es el frío del invierno que congela mis neuronas
Saludillos

Kum* dijo...

La revancha de una mujer astiada, el despiste de una mujer desinteresada, aburrida, los desvaríos de un moribundo... Muchas esquinas desde donde mirarlo. Inquietante, Belén. Me gustó mucho. Y la frase final es... muy... MUY.

Pd: Hoy, escribiendo desde un cíber en un pueblito de México, donde una docena de chamacos se andan matando on-line (con los sonidos de disparos y gritos a toda hostia)... extrañé tremendamente a Zoë. Qué cosas...

Un beso, la mejor opción.

Ausencia Silenciosa dijo...

Yo habría dejado "mi vida", al menos en la muerte se nos debería permitir ser algo egocentristas...

Excelente, como siempre, tu relato! :)

Belén Lorenzo dijo...

Patricia: muchas gracias! Sí, es tan raro que no sabía cómo etiquetarlo :oS

Juan: estás exigente últimamente, eh? :o) Sé que es con cariño, igual que mi comentario. El texto lo veo ligero, o más bien, "falsamente ligero", pero creo que no le viene mal. Creo que acompaña a lo absurdo de la historia.

Maite y Claudia: muchas gracias. Yo creo que el texto se puede leer casi como un chiste (cosa que no pretendía), o se le puede ir obteniendo distintas reflexiones: 1) una persona que cree controlarlo todo y es mentira 2) irónicamente el mensaje que deja no sólo es lo que no quería, sino que al final es diferente y accidentalmente es mucho más profundo que el epitafio que tenía pensado 3) Sus amigos lo reconocen en un mensaje que no es suyo 4)...

Puck: no, qué va, está muy bien ¿porqué no? Yo no lo digo, con lo cual se puede pensar infinidad de cosas. De hecho su versión está muy bien :o)

Kum*, lo de los chamacos fue cosa mía. Les dije que te molestaran un poco a ver si vuelves fan de Zoë :o) Gracias, desde luego un beso siempre es la mejor opción.

Ausencia silenciosa: jajaja, tienes razón, total, en esas circunstancias, ¿qué menos? Muchas gracias.

7 abrazos para repartir a partes iguales!

Juan Vásquez dijo...

hey sí, que pena con vos Belén. Hasta te mandé un mensaje al correo electrónico disculpandome. Ojalá si haya sido la dirección correcta; vos seguís siendo una de mis blogueras favoritas (no que yo sea alguien importante para decirlo pero quería que lo supieras ;)

Feliz semana

Sucede dijo...

Belén, genial! Yo me preguntó si fue un error del que transcribió el mensaje porque aún se encontraba el hombre en divagaciones, o si eligió la frase después de volverse loco entre la vida y mi vida...muy ocurrente!
Mi epitafio es más largo, 49 palabras exactamente, jaja.
Un abrazo!!

Sucede dijo...

Belén, genial!
Es al segunda vez que te escribo, porque esto falla a veces con ese "Error 503"...buen epitafio también verdad? jaja
Me ha encantado, me pregunto si el epitafio final fue el resultado de un error de transcripción de la funeraria debido a las divergencias de ese hombre, o si tal vez la locura le atrapó divagando entre mi vida y la vida...
Muy ocurrente!

Chula dijo...

Muy ingenioso, invita a reflexionar. Me ha gustado mucho.
No tengo una biblioteca muy extensa, hasta que pude permitírmelo siempre tiré de la pública, pero curiosamente coincide que tengo los dos libros que estás leyendo. El de la niña mala confieso que en su día me atrajo más el título que el peso del autor. Me ha gustado más obabakoak. Te deseo una placentera lectura. Un abrazo.

Belén Lorenzo dijo...

Ay, Juan... Lo que ya comenté. No te cortes nunca para hacer comentarios! Cuento con ello.

Sucede, el tuyo daba para dos personas por lo menos :o) Gracias por partida doble.

Chula, de momento estoy más con Obabakoak. Había leído en otro libro el cuento sobre la mujer que decide taparse la cara con una red cuando se quema las manos, y cuando vi el Obabakoak el la librería no me podía creer que "viniera" él solito hasta mí. De momento me gusta bastante. El de Vargas Llosa también, pero ahora lo estoy leyendo menos. Ya te contaré :o)

Un abrazo inmenso para cada uno!

Torcuato dijo...

Al final, al tipo no le gustó lo de la vida oye.
Un beso.

Belén Lorenzo dijo...

En esas circunstancias, igual es lo mejor :oS
Un beso, Torcuato.

ROSIO dijo...

Muy bueno Belén, la verdad su blog es muy lindo, siempre lo leo, aunque no siempre comente, muchas veces no se que decir, en fb es mas facil, pongo me gusta.
Saludos CrMg

Belén Lorenzo dijo...

Gracias, Rosio, no tengo palabras! Me he di cuenta de que comentas más en facebook, pero no importa. Comenta cuando quieras y como quieras. Un abrazo y muchas gracias por tus ánimos.